Si tu boda va a ser al aire libre, rodeados de árboles y flores, en un entorno típicamente asturiano como el de La Barrera, ¿por qué no ofrecer a tus invitados un plato tan tradicional y llamativo como el cordero a la estaca?
Estamos seguros que muchos invitados agradecerán poder disfrutar de un cordero criado de forma natural y poder ver cómo se cocina allí mismo por un profesional especializado.
No es fácil cocinar un cordero a la estaca. Requiere de maestría y experiencia.
Se debe dejar durante dos días en un sitio fresco. Luego se abre en canal y se atraviesa de arriba a abajo con un hierro; las patas se sujetan con un palo de forma que queden bien abiertas y se pone sobre un fuego hecho de madera de roble. Se va girando poco a poco durante unas dos horas para que se haga de forma uniforme. Mientras, se rocía con la salsa que también se habrá hecho dos días antes para que macere.
Para conseguir que sea un éxito hace falta que el cordero haya sido criado y alimentado de forma natural y así conseguir un óptimo sabor y la profesionalidad del cocinero.
Es todo un espectáculo ver cómo se van haciendo lentamente los corderos y estamos seguros que tus invitados, sobre todo los que sean de fuera, lo disfrutarán.
