Los dos hermanos conocidos como “los Pachorros”, indianos emigrantes en Argentina, encargaron a finales del siglo XIX al arquitecto Juan Miguel de la Guardia la construcción de Villa La Barrera y la vecina Villa La Argentina.
Aunque de estilos bien diferentes, ambas forman parte junto con Villa Rosario, Villa Excelsior y otras del conjunto de casas de indianos que pueblan Villar y la convirtieron en zona residencial de Luarca a principios del siglo XX.
En La Barrera, construida en 1899, destacan las fachadas enfoscadas y pintadas en rojo. Se alternan en muros opuestos lo estilos clasicistas y goticistas. En la fachada este clasicista, sobresalen dos escalinatas que se corresponden con dos puertas de acceso al interior y que descubren otro tramo de escalera.
En el centro de la planta y situado en el semisótano, un pasillo atraviesa el edificio de este a oeste. Son de destacar las pinturas murales del interior tanto en paredes como en techos, cenefas y molduras, así como los azulejos policromados de los baños y una bañera de aspecto neoclásico-romano y tono rosáceo de una sola pieza.
Es una edificación de gran originalidad y rareza en las construcciones de Juan Miguel de la Guardia, así como en la mayoría de los edificios realizados para burgueses o indianos.
Si la tónica dominante es este tipo de edificaciones es la esbeltez de inmueble, en este caso predomina la horizontalidad.
En esta casa se alojó por dos veces el entonces Príncipe de Asturias, don Alfonso de Borbón, hijo de Alfonso XIII (primero por la derecha, en una fiesta celebrada en La Barrera en 1930).